A lo largo del año 2022 se han instalado en 14 pueblos de la provincia de Córdoba, un conjunto de muebles con el fin de contener un archivo documental vivo y en evolución de los libros que abordan de un modo científico los acontecimientos relativos alas temáticas de Memoria Histórica. Emulando los “rincones violeta” que solemos encontrar en cualquier centro de lectura, se trata de aglutinar en un solo punto el material bibliográfico con el fin de que pueda ser consultado, facilitando así el intercambio de conocimiento entre los diferentes autores y las poblaciones, procurando así verdad, justicia y reparación para las personas que lucharon por la democracia. Son trece los municipios seleccionados en los que se ha ubicado este singular receptáculo, semejante a una escultura constructivista. Adaptables a los distintos lugares en que se ubiquen, pueden extenderse bien en la pared o erigirse en las distintas direcciones del espacio.
La asociación ContraCultura de Puente Genil propuso el proyecto a la Delegación de Memoria Histórica y Democrática de la Diputación de Córdoba. De su diseño individualizado y materialización es responsable Javier Flores.
